Las imponentes torres del castillo se reflejan en las aguas del Oust. El castillo, propiedad de la familia Rohan, una de las estirpes más antiguas de Bretaña, es el símbolo de esta bonita ciudad. Calcula medio día para pasear sin rumbo fijo por las callejuelas llenas de encanto de este Pequeño Pueblo con Carácter y visitar la basílica.
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Descubrir Josselin
Josselin, etapa importante de la ruta de los Duques, se asoma al río Oust. La historia de la ciudad está muy vinculada a su castillo, que domina la ciudadela. El castillo es de estilo gótico flamígero y un interesante ejemplo de la arquitectura feudal y renacentista. Fue fundado a principios del siglo XII y en la actualidad sigue estando habitado por los descendientes de sus fundadores: la familia Rohan. Disfruta de sus bonitos jardines. Son obra de Achille Duchesne, paisajista que también trabajó en Vaux-le-Vicomte.
El barrio de Sainte-Croix, tan antiguo como el castillo, construido alrededor de la encantadora capilla homónima, presenta bonitos ejemplos de casas medievales de entramado de madera. Aunque la más antigua data de 1538, todo el barrio fue restaurado en 2006.
¿Lo sabías?
Una estatua milagrosa
Cuenta la leyenda que un campesino en el siglo IX descubrió en un bosque la estatua de la Virgen y que ésta devolvió la vista a su hija ciega. La basílica de Notre-Dame-du-Roncier es un santuario que conmemora este milagro y que rápidamente se convirtió en un lugar de peregrinación de enfermos en busca de curación. La estatua de la Virgen fue destruida durante la Revolución y ha sido sustituida por una obra moderna.
Siguiendo el río Oust
Aprender divirtiéndose es el leitmotiv del circuito « Au fil de l’eau » (A lo largo del agua). Un recorrido divertido y educativo que pone de relieve el río Oust, los espacios naturales y su biodiversidad. Una forma original de descubrir la fauna, la flora y la historia local. Gracias a los audios podrás escuchar historias como la de las lavanderas de antaño, entre labores y chismorreos…
