Si te gustan los paisajes que se mueven entre la tierra y el agua, las marismas de Redon te convencerán. Los ríos Aff y el Canut han abierto magníficos valles que te permitirán disfrutar de paseos inolvidables entre las marismas y la variedad arquitectónica. ¡Lo mejor es hacer la visita en barco!
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Descubrir Redon y su estrella de valles y marismas
En la confluencia del río Oust con el Vilaine se alza el pueblo de Redon como si fuera una isla en tierra firme. Las marismas en forma de estrella rodean la ciudad confiriéndole un carácter único. Además del casco antiguo y de la magnífica abadía de Saint-Sauveur, la riqueza del paisaje se puede descubrir tanto a pie como en barca. Ríos ricos en variedades de peces y reservas ornitológicas impresionantes son solo una muestra de un patrimonio natural excepcional.
¡Al barco!
Alquilar un barco en La Roche-Bernard, Redon, Messac o en Pont-Réan es sin duda la mejor forma de conocer la zona de marismas de Redon. Durante ese paseo podrás admirar pinos marítimos y castaños, así como salinas y antiguas plazas fuertes que salpican las orillas del río Vilaine. Es un sorprendente paseo sobre el agua.
¿Lo sabías?
Bailar no siempre sienta bien
¡No hay salida!
¿Conoces a las Señoritas de Langon? Ese es el nombre del alineamiento de menhires del pueblo del mismo nombre. Cuenta la leyenda que las señoritas de Langon fueron convertidas en piedra porque fueron al baile en lugar de ir a la iglesia.
Una inmensa abadía
Conocer Redon y su magnífica abadía benedictina de Saint- Sauveur te llevará algunas horas, demostrando porque fue el centro religioso más importante de la Edad Media. El elegante casco antiguo conserva un hermoso legado arquitectónico del pasado. Admira el castillo del Mail o el Palacete de Richelieu y su torreón cuadrado.