Festivales, museos, visitas guiadas: ¡el arte urbano gana terreno en Bretaña! War!, Heol, Zag&Sia y Wen2 son algunos de los artistas regionales más destacados. Veamos cómo se expresa el street-art en las ciudades bretonas.
Graffitis, collages, plantillas y pegatinas… En Rennes encontramos arte urbano por todas partes y ¡cada cual tiene su estilo! WAR! es uno de los artistas destacados con sus amapolas, libélulas o suricatas gigantes. Su gusto por el anonimato le ha valido el apodo del « Banksy de Rennes ». También llaman la atención los frescos aéreos de HeolArt y los retratos hiperrealistas de Aero, otras de las referencias del street-art de Rennes. Podrás descubrirlos paseando por la calle o mediante una visita guiada con Destination Rennes. Cada primer domingo de mes, una galería al aire libre, el MUR, rue Vasselot, ofrece un espacio creativo a los artistas para que den rienda suelta a su creatividad ante los ojos del público. Otro evento destacado del « universo street » es la bienal Teenage Kicks, una mirada inédita y exigente sobre el arte urbano contemporáneo y cuyo momento cumbre es la renovación del Wall of Fame.
Con sus múltiples iniciativas, ¡la ciudad de Saint-Brieuc parece una galería a cielo abierto! Cerca de la estación de tren renovada, un colectivo de barrio ha lanzado el proyecto Robien les murs (Ndt: Robin de las paredes), que reúne tesoros como el apretón de manos gigante del parisino Yol. En Le Légué, en el hangar donde los pescadores apilan sus redes como en las paredes del puerto, Averi y otros artistas multiplican las representaciones del mundo marino.
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3. Cuando las paredes hablan…
Brest
Desde el puerto comercial hasta Recouvrance, pasando por Les Ateliers des Capucins… en solo unos años, Brest se ha convertido en un lienzo gigante para artistas callejeros de todo tipo,Wen2 y PakOne, dos figuras destacadas del arte urbano de Brest, o Liliwenn, impulsora en 2011 del proyecto Crime of minds (NdT: Criminal-mente) del cual aún perviven unas veinte obras. Interesantes también los frescos urbanos del proyecto Les murs prennent la parole (NdT: Las paredes hablan) en la margen derecha, sobre todo en rue Anatole France. Cada vez menos vistas por la ciudad, las siluetas de Paul Bloas, otra referencia del Finisterre, se pueden ver en la galería Up Art, en Recouvrance.
El festival Les Escales ha dejado su huella en el barrio de Ville-Port y en el Petit-Maroc. Las paredes de la residencia Les Caraïbes se alegran con el fresco panorámico de fynbos, una flor típica de la región del Cabo, de la sudafricana Nardstar e hipnotizan con los monumentales retratos de Adnate. La estadounidense Ellen Rutt hace bailar formas y colores en una composición abstracta que ilumina el edificio Panama. En avenue Léon Blum, el elegante grafismo en blanco y negro de David de la Mano reúne memoria colectiva y hechos históricos relevantes. Y no olvidemos a les Oides (« dedos » en argot),unos personajillos azules que se pueden seguir por el centro de la ciudad hasta el sendero des Douaniers… ¡y más allá! Dicen que hay más de 500 en toda la región.