Musée Mémoires 39-45

Esta fortaleza de hormigón plantada en medio del campo ofrece una curiosa imagen. En primera línea de la ensenada, este búnker gigantesco de cinco plantas servía de protección al centro de mando de la batería de artillería de marina Graf Spee, la más importante de Finisterre por su potencia y tamaño. Aurélien y Clément, dos hermanos coleccionistas y apasionados de la historia, han transformado este laberinto alemán en museo. Miles de objetos, documentos y fotografías de la época forman parte de la exposición de 500 m², que se nutre igualmente de testimonios y anécdotas. Adentrarse en esta fortaleza es como introducirse en la vida cotidiana de los soldados de la muralla atlántica, en la memoria de los civiles atrapados en la tormenta hasta la sangrienta liberación. El hermoso panorama del mar de Iroise que se contempla desde la terraza nos recuerda la posición tan estratégica que ocupaba esta obra militar.

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