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Visites guidées des Falaises d'Armor
La Bretaña secreta: senderos, calas y joyas históricas
Visitas guiadas
en Lanvollon
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Las Falaises d’Armor, entre tierra y mar, protegen 14 kilómetros de costas silvestres, de playas y cabos rocosos. Un destino ideal para regenerarse lo más cerca posible de la naturaleza.
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Tome el sendero costero (GR 34). A la altura de los acantilados de Plouha, se eleva a 104 m de altura y ofrece vistas de una belleza arrogante sobre el litoral escarpado de Goëlo. Al pie de los acantilados, pequeñas calas rodeadas de rocas dan paso a extensas playas y puertos de fuerte carácter. El puerto de Gwin Zegal alberga uno de los dos últimos fondeaderos sobre pilotes de madera de Bretaña. La capilla de Kermaria an Iquit y su fresco que representa una danza macabra, la pequeña ciudad...
Tome el sendero costero (GR 34). A la altura de los acantilados de Plouha, se eleva a 104 m de altura y ofrece vistas de una belleza arrogante sobre el litoral escarpado de Goëlo. Al pie de los acantilados, pequeñas calas rodeadas de rocas dan paso a extensas playas y puertos de fuerte carácter. El puerto de Gwin Zegal alberga uno de los dos últimos fondeaderos sobre pilotes de madera de Bretaña. La capilla de Kermaria an Iquit y su fresco que representa una danza macabra, la pequeña ciudad medieval de Chatelaudren, la Chapelle Rouge, joya del siglo XV, y la antigua imprenta del Petit Echo de la Mode, hoy centro cultural, aportan un toque patrimonial a su paseo. Más al sur, los 40 km de senderos señalizados del bosque de Avaugour-Bois Meur invitan a adentrarse en el imponente macizo forestal. Entre naturaleza y cultura, tierra y mar, ¡este es uno de los lugares más entrañables de Bretaña!
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