De un vistazo
Se dice que aquí el mar sube a la velocidad de un caballo al galope. Descubre la bahía del Monte Saint-Michel a lo largo y a lo ancho… e incluso a traviesa, con los pantalones arremangados, ¡por supuesto! La bahía va desde la punta du Grouin Sud, donde el Museo Ecológico revela todos sus secretos, hasta el pintoresco puerto de Cancale. Pasea por los parques de ostras o de mejillones, deambula por las callejuelas medievales de Dol-de-Bretagne, visita la ciudad corsaria de Saint-Malo… ¡Una estancia con paisajes y ambientes de lo más variados!